¿Cómo enfrentarse a un elefante en un bazar?

Sin embargo, hay un aspecto extra que no suele tenerse en cuenta y que sirve para mensurar la importancia de los actores pequeños y medianos en sus respectivas comunidades: el sector pyme y cooperativo emplea hoy a 16 000 personas en todo el país. Son miles de puestos de trabajo en decenas y decenas de compañías y cooperativas a lo largo y a lo ancho del país. La pérdida o la reducción de estos empleos en ciudades con menos de 500 000 habitantes supondría un duro golpe.

Y no es cuestión de competencia sí o competencia no. En público y en privado el discurso es el mismo: “No tenemos miedo de competir”. Pero inmediatamente después aparece la salvedad, que puede reducirse a algo así como “si las condiciones son iguales para todos”. Competir, sí, pero en un campo de juego en el que las reglas sean las mismas para todos los jugadores.

Lo que se puede decir

Oscar Nocetti, conocido cooperativista, presidente de la Cooperativa Popular de Electricidad (CPE), Obras y Servicios Públicos de Santa Rosa (La Pampa), se opone directamente a la fusión: “Como cooperativas, por nuestro ADN, estamos en contra de este tipo de fusiones que conllevan privilegios extraordinarios, en caso de que las autorice el regulador”, dice. “Si Defensa de la Competencia actuará ecuánimemente, esta megafusión no debería ser aprobada porque rompe con todo los establecido. Pero sabemos cómo juega este gobierno y creemos que será aceptada”, se sincera. Cabe señalar que no todos piensan igual: desde empresas Pyme le dijeron a Revista Fibra en off que “nunca” se van a oponer a una fusión porque “es parte inherente del funcionamiento de las empresas”.

El titular de CPE está seguro que la fusión le va a pegar de lleno a las cooperativas. “Nos va a afectar, somos competencia en telefonía y televisión por cable, y van a agregar 4G al paquete que ofrezcan”. Señala además que desde siempre Cablevisión actúo en grises legales: “En Santa Rosa y en Toay no tenían licencia, operaban de hecho, amparados en fallos judiciales luego de que el municipio los intimará. Ahora regularon la situación”, describe lo que él cree que es una prueba de que piensan desembarcar con todo en la zona pampeana. “También están actualizando sus redes, están reemplazando pares de cobre por fibra”. Para terminar de graficar explica que mientras que en Córdoba la conexión a Internet de 6 megas las comercializan a 880 pesos, en La Pampa ese valor baja a 290. “Aquí Fibertel tiene precios únicos, muchos más bajos que en el resto del país, ellos actúan en función del mercado en el que se encuentran, sin importar los costos”, indica. “Y van a venir con ofertas más grandes porque aquí en Santa Rosa Cablevisión y Fibertel son un muñón, perdieron el mercado y los dominantes somos nosotros. Van a tener que trabajar mucho para convencer de que van a ofrecer un mejor servicio; somos una muralla dura de sortear. Hasta el momento, hemos ganado la competencia porque los precios y la calidad de la cooperativa han sido mejores que los de ellos en La Pampa”.

“Vemos además que la competencia que darán en celulares será desleal, porque a pesar de que las cooperativas hemos presentados carpetas y proyectos varios para ser autorizados a ser OMV que aún no fueron autorizados, el grupo tiene todo avanzado para actuar como un nuevo carrier. Nos asombra la velocidad con la que avanza esa megafusión, más cuando tenemos en cuenta la morosidad que tienen para con nosotros”, se explaya Nocetti.

Sin referirse específicamente a la fusión, el presidente de Catel, Ariel Fernández Alvarado, manifiesta: “Con motivo de la concentración que se viene dando en nuestro sector, hoy para los cooperativistas es muchísimo más importante que antes trabajar en la nueva ley convergente que va a regular el servicio. Para nosotros es fundamental que las entidades sin fines de lucro tengan un tratamiento especial en esa nueva ley”.

Al igual que Nocetti, Fernández Alvarado se refiere a los pedidos de operación de los Operadores Móviles Virtuales. “Todavía está pendiente”, comenta. “Queremos ser capaces de ampliar nuestra oferta en todos los servicios, dar realmente cuádruple play.” En este sentido, menciona el presidente de Catel, “una variable no menor es la del tiempo: para competir hace falta tiempo suficiente para tener todos los registros y prepararse tecnológicamente”.

Un problema extra que remarca el dirigente es lo que sucede cuando entre Cablevisión y Telecom reúnen la oferta completa de una localidad. “Es ahí donde le afecta más al consumidor. Esto pasa mucho en el Norte del país, y ahí hay que ser más cuidadosos: ya no sólo se trata de evitar que desaparezcan los actores pequeños y medianos sino de proteger al usuario final”.

Por su parte, Osvaldo Petrilli, gerente de Fecotel, es bien cauto: “No tenemos una opinión formada, estamos evaluando todas las aristas”. Sin embargo, menciona sí que “van a aparecer nuevos negocios” y que por esa razón quieren “ser cautos antes de dar una definición”.

Y lo que no

Mientras que Nocetti no se calló nada en su charla con Revista Fibra, otras fuentes del sector pyme y cooperativo pidieron un estricto off para hablar. Una vez que el grabador se apaga, las posturas se relajan y las opiniones son más jugosas.

Una fuente del sector cooperativo subraya que habrá muchos perjudicados aunque, admite, de seguro habrá empresas que puedan realizar negocios con Cablevisión. Y tanto desde las cooperativas como desde las pyme cuentan, además, que están conversando con Telefónica de Argentina para “hacer negocios, porque ahora si quieren charlar; están proponiendo negocios que antes no proponían”. ¿Qué negocios? “Desde OMV hasta mantenimientos de redes en sus zonas de baja densidad, para que lo tercericen a través de una Pyme o una cooperativa. Telefónica va a concentrarse en lo que sean más rentable, va a privilegiar movilidad. A lo fijo le van quitar el foco y ahí entramos nosotros, como un aliado estratégico”.

Una tercera fuente plantea que ni Claro ni Telefónica han salido en público a poner el grito en el cielo. “Es un dato no menor que no hayan salido a romper. Creo que tendrán una estrategia en común pero no irán juntos. Quieren, al menos, poder meter un pie en los satelital.”

La misma fuente del principio de este apartado comenta, sin embargo, que hay recordar que los negocios de cooperativas y pyme de las telecomunicaciones “son marginales y no definen los negocios de una empresa como Telefónica o Cablevisión”. Y, para peor, “no hay una unidad dentro del movimiento cooperativo”, argumentan. “Pierri, con Telecentro, tiene a dos millones de abonados, y nosotros tenemos 600.000. Esa es la realidad de las cooperativas, y el que no la quiere ver, que no la vea. Somos más chicos que Pierri, una empresa de referencia que arrancó hace poco”, puntualiza, amargado, una de los consultados del sector que prefiere no salir con nombre y apellido. “Estamos hace 50 años en el mercado; somos pioneros en la prestación del servicio universal, damos comunicaciones donde ni el Estado quería darlas, y por eso tenemos que hacer negocios con todos, principalmente con Arsat, para mejorar la calidad de las conexiones y reconvertirnos tecnológicamente. Y hay que respetar la idiosincrasia de cada cooperativa y cada empresa. No es lo mismo dar comunicaciones en Pinamar que en Tortuguitas o en Yuto, en Jujuy”.

Otro de los consultados es taxativo. “El gobierno permitió la creación de la empresa más grande de la Argentina, de un monstruo al estilo Telmex. Y sólo hay que mirar la historia para saber cómo van a actuar”. Se pregunta luego qué va a hacer el gobierno en las ciudades donde los servicios de Telecom y de Cablevisión se pisan. “¿Van a sacar una ley para habilitarlos? ¿O un decreto? ¿Qué obligaciones van a tener? Las cooperativas, los cableros y las ISP pyme pagamos un 63% de impuestos y estoy seguro de que ellos pagan menos”, sostiene. “Y no tiene que ver con cambios en los gobiernos: cambiaron los ejecutantes pero la música es siempre igual, aunque digan lo contrario. Y siempre les dan vía libre. Te doy un ejemplo: un ISP de Entre Ríos empezó a instalar fibra. ¿Qué hizo Cablevisión para competir? Puso una oferta en la que redujo sus precios un 50%, debajo de los costos. Te extorsionan, te subastan el servicio y así es muy difícil subsistir. La industria quiere evitar que el conflicto se politice pero hay algunos partidos políticos que quieren usarlo para llevar agua para su molino”.

Las pyme y cooperativas están preocupadas. “Vamos a sobrevivir, pero aún no sabemos bien cómo”, dicen. “No existen negocios con el grupo Clarín en el que otro más que ellos se hayan beneficiado. Con la envergadura que van a tener vemos difícil algún acuerdo. Siempre han sido muy agresivos en sus tratos con las cooperativas, hasta llegar a la ilegalidad”. Y mencionan, como ejemplo, a la Red Intercable, “una estrategia para quitar a las otras cámaras y federaciones del medio. Generaron un acuerdo con Intercable en vez de negociar con nosotros (Colsecor, Cacpy, Catel y Cabase), que agrupamos el 95% del mercado cooperativo y Pyme”.