Entrevista a Franco Cecchini, director de IPLAN.
Por Carolina Martínez Elebi (*)
Franco Cecchini es director de IPLAN, una empresa que actualmente cuenta con 20 000 clientes y que ofrece servicios de internet, telefonía IP —la primera del país, fundada en 1999— y ahora también cuenta con cinco datacenters y ofrece servicios cloud. Cecchini, quien también es titular de la Cámara Argentina de Transmisión de Voz y Datos Bajo Protocolos No Tradicionales y Comunicaciones convergentes (CATIP) y miembro del Comité Ejecutivo de CABASE, conversó con Revista Fibra sobre el contexto actual de las telecomunicaciones en el país, sobre lo que afirmó: “Las empresas globales ven a Argentina como un kiosco de barrio”.
¿Cómo ves la situación actual del sector de telecomunicaciones en el contexto regulatorio actual, mientras se trabaja sobre una ley de Comunicaciones y rige el decreto 267/2015?
Evidentemente, el decreto ha cambiado enormemente la posición porque le ha dado la posibilidad de jugar, básicamente, al Grupo Clarín. Es un decreto que ha cambiado condiciones que le permiten a este grupo expandirse en un negocio donde, hasta ahora, no lo tenía permitido. De todas formas, es un decreto hecho muy rápidamente y es un decreto que tiene que tener como destino final una nueva ley de comunicaciones, donde todos los jugadores del mercado puedan aportar y donde tengamos una visión de país que sea para todos los argentinos. Argentina es un país con muchísimo territorio y poca gente, con lo cual las telecomunicaciones, las comunicaciones, tienen un rol clave para poder acercar la educación, el comercio, el entretenimiento, y desarrollar el vasto territorio que tiene el país. Creo que no es hora de pensar en las empresas, sino que es hora de pensar en los argentinos.
Me parece que la Red Federal de Fibra Óptica (REFEFO) ha sido una idea de avanzada, una muy buena idea para la geografía como la que tiene Argentina, y que es una idea que hay que profundizar, avanzarla y ponerla en marcha. La gestión anterior tuvo muy buenas ideas y muy pocas realizaciones. En eso, soy muy crítico de cómo se efectuó la REFEFO y sí valoro mucho la idea.
Actualmente, estamos muy expectantes, ya que tenemos un reglamento de Operador Móvil Virtual (OMV) que es decididamente mejor que el que teníamos, que era prohibitivo y era hecho a medida del oligopolio. Era un reglamento muy malo. Hoy tenemos un reglamento que permite más el acceso a las PyMEs y a las cooperativas. Me parece que la Argentina tiene muchos emprendedores en el interior del país, en las grandes ciudades, con muchas ganas, con entusiasmo y con capacidad de invertir en fibra óptica, en GPON¹, en redes de ethernet que, particularmente para nosotros, estas últimas son el pasado, y nosotros las estamos abandonando en función de las redes de GPON.
Teniendo en cuenta este reglamento de los OMV, ¿qué expectativas tienen?
Creo que, obligatoriamente, las empresas entrantes tienen que ofrecer a la sociedad algo mejor de lo que hay. Eso ha sido la sobrevida de muchas entrantes, y también ha sido la muerte de muchas otras, como en el año 1999-2000, con la burbuja de internet y con la liberalización de las telecomunicaciones en Argentina, yo creo que habrán venido más de 100 compañías y, de esas 100, quedamos alrededor de un tercio. Pero los que hemos sobrevivido, lo hicimos lidiando con una falta de regulación, una falta de presencia del Estado que, como siempre, las empresas más pequeñas lo sufren. Muchos somos sobrevivientes de eso con unos socios espectaculares que son nuestros clientes. Nosotros dependemos solamente de ellos. Las empresas del oligopolio dependen de las tarifas, de cuánto el gobierno les deje aumentar sus precios y de cuánto les deje tener una mala calidad de servicio. Hoy, la telefonía móvil lidera el mal servicio de la Argentina, que es el sector que más reclamos recibe por su mala prestación y sus altas tarifas. ¿Por qué? Porque hay tres compañías que, entre las tres, lideran el mercado y, entonces, deciden la calidad y el precio entre ellas.
Yo creo que la solución está adentro, en las empresas argentinas, en los argentinos que quieren invertir. Las tres palabras que CATIP tiene en este momento son competencia, convergencia e inversiones.
¿Qué esperan de la nueva ley de Comunicaciones?
La verdad es que tenemos mucha incertidumbre. Estamos colaborando, estamos siendo consultados por la comisión redactora de la ley, y estamos elaborando nuestros documentos, pero todavía tenemos mucha incertidumbre. Creo que algo que debe ser tenido en cuenta para la regulación es permitir una competencia genuina, razonable, efectiva. Es decir, una competencia que tenga un efecto sobre el usuario, no una guerra de payasos que parece que se golpean mucho y que hacen mucho ruido, pero que terminan saliendo abrazados del circo.
Argentina tiene que enfocarse en lo que indica la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) que dice que la competencia tiene que tener un efecto beneficioso sobre el conjunto de la sociedad. Para que haya una competencia efectiva, quienes no tienen espectro deberían poder pagar por el espectro lo que éste vale, más una tasa de ganancia razonable a aquellos que lo hayan adquirido. Nadie quiere algo gratis, pero tampoco queremos que haya precios prohibitivos que saquen del mercado a las empresas que quieren invertir y competir.
¿Cómo los posiciona la actual tendencia hacia la convergencia?
Nos posiciona muy bien, porque nosotros nacimos convergentes. Esto significa que nuestras redes no están atadas a un servicio, sino que son redes adaptadas a cualquier servicio. Por nuestras redes de fibra óptica, lo que circula es información y nosotros no vemos la diferencia entre una comunicación telefónica y una película. Es exactamente lo mismo.
Al haber nacido convergentes, no tenemos que hacer estas grandes inversiones que tiene que hacer el oligopolio para maquillar y disfrazar algo como los cables de cobre, que fue creado para que la gente hable por teléfono, poniéndole algo de tecnología, que es el ADSL, para convertirlo en algo como una red de datos. Es decir, lo convirtieron en una red de datos, pero sigue siendo un cable de cobre para hablar por teléfono.
Sin embargo, nosotros instalamos fibra con el protocolo IP desde el año 99, que nos permitió abrir la cabeza y generar la convergencia. De hecho, en nuestro datacenter, en el que invertimos unos 20 millones de dólares hace cuatro años, estamos brindando servicios cloud, servidores virtuales. Estamos hablando de tecnología de última generación.
Nosotros no le tenemos miedo a la competencia. Creemos que al pensar en el cliente y haciendo mejor las cosas, nos va a ir bien. De hecho, nuestros 20 000 clientes eran clientes de Telefónica y Telecom.
Sobre la empresa
IPLAN es una de las principales compañías que se dedica a la provisión de conectividad, datacenter y servicios cloud para las empresas de las ciudades más importantes de la Argentina. La red de fibra óptica de la empresa es la tecnológicamente más avanzada y potente del mercado y fue la primera desarrollada enteramente sobre tecnología IP nativa de América Latina.
El 5° datacenter de IPLAN es el más moderno de la Ciudad de Buenos Aires. Este representó una inversión de 20 millones de dólares en infraestructura y tecnología y quedó operativo a partir de noviembre de 2012.
Actualmente, IPLAN se encuentra en pleno proceso de expansión, ampliando su oferta de servicios cloud a todo el país.
¿Por qué Argentina sería un lugar para invertir en tecnología de última generación?
En primera instancia, Buenos Aires es una de las ciudades más grandes y con un gran comercio y PBI. Buenos Aires, Rosario, Córdoba son ciudades que necesitan una oferta de tecnología de punta, por su posición. Por supuesto que esa tecnología de punta, con buenas redes, podríamos llevarla a todos los lugares del país.
Ahí es donde está el valor de la REFEFO y de las redes locales, tanto en cooperativas, como en cableras, como el trabajo que se realiza en CABASE, que es llevar toda esa cabeza, donde hay un montón de tecnología, a la persona que vive en la puna en Jujuy pueda tener exactamente las mismas posibilidades que la que tiene alguien que vive en Villa Crespo. Ahí es donde el gobierno debería poner el centro. Que la igualdad signifique que todos puedan llegar a la misma tecnología, sin importar dónde esté esa tecnología. De hecho, algunas veces fantaseábamos en colocar el datacenter en un lugar frío porque así no necesitaríamos tantos recursos para enfriarlo en verano. Con esa lógica, podríamos poner un datacenter en Neuquén. Pero, para eso hacen falta redes que lleguen a Neuquén en la capacidad necesaria. Lo que pasa es que, como todavía tenemos este esquema unitario de que todo llega a Buenos Aires, fuimos obligados a poner nuestro datacenter acá, pero si hubiera redes, pensaríamos claramente en hacerlo en un lugar más frío, donde el frío sería una habilidad y podríamos venderles nuestro frío a los países cálidos del mundo.
Ficha técnica
• Fundación de la compañía: agosto de 1999.
• Grupo inversor: IPLAN LLC.
• Proveedores de tecnología: Cisco,
EMC, Google, VMWARE.
• Extensión total de la red: + 1000 Km
de fibra óptica.
• Cobertura de red: Buenos Aires,
Córdoba Capital, Rosario.
• Inversiones 2016: US$11 millones.
• Clientes: +15 000 empresas clientes.
• Facturación 2015: $670 millones.
• Datacenters: Buenos Aires: Los Patos
2948/54 Distrito Tecnológico.
Reconquista 865, CABA.
Virrey Cevallos 422, CABA
Córdoba: Hipólito Yrigoyen 146 10°.
Rosario: Córdoba 1877.
¿Cómo ves la situación actual de la telefonía móvil?
Hablar de servicio móvil hoy es una falacia, porque las redes de fibra óptica llegan a tres o cuatro antenas en cada manzana. Ya hoy es una red fija que tiene un último pedacito móvil, donde también gran parte de ese pedacito se lo lleva el offloading. Está claro que el servicio móvil es un sector donde hay mucho por hacer.
En cuanto a la red fija, desde IPLAN estamos desarrollando el negocio residencial donde vamos a llegar al usuario con 1 giga, porque la red que estamos extendiendo es naturalmente de esa capacidad. Entendemos que, cada vez más, el usuario residencial va a necesitar más ancho de banda que lo que necesitan las empresas. Eso no se puede hacer a través del cable de cobre, sino de la fibra. Por su parte, las empresas empiezan a necesitar menos ancho de banda y más tecnología para almacenar y procesar datos. Vemos un país 95% fibra y 5% móvil.
Hoy tenemos un oligopolio móvil y lo que tenemos que hacer es que exploten las inversiones de empresas que quieran desarrollar el servicio en la Argentina y empresas que quieran poner fibra. No tenemos que quedarnos en el elefantiásico (sic) mundo de las empresas globales que ven a Argentina como un kiosco de barrio o como un lugar para extraer ganancias, porque sus negocios están en otros lugares.
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1 Red Óptica Pasiva con Capacidad de Gigabit (GPON o Gigabit-capable Passive Optical Network, en inglés) es una tecnología de acceso de telecomunicaciones que utiliza fibra óptica para llegar hasta el suscriptor.
(*) Lic. en Ciencias de la Comunicación (UBA). En Twitter es @titayna.